Enviado por Paulo Sergio Tomás, Epifânia Huate, Anna Carolina Machado y Silvia Pieretto
20 ene 2022

Integración de la protección social en los protocolos de Acción Anticipatoria ante una sequía en Mozambique

Anticipatory action in Mozambique.
Anticipatory action in Mozambique. © WFP/ Denise Colletta

En los últimos años, Mozambique ha logrado avances significativos en la previsión de sequías. Éstos se han logrado gracias a la adopción de un enfoque previsor, concretamente en el diseño y despliegue de herramientas, y a la asignación de la financiación necesaria para ello.También ha sido fundamental la integración de los agentes multisectoriales, incluidos los de protección social.

Este cambio -de un enfoque reactivo a otro con visión de futuro- estuvo motivado por los retos a los que se enfrentó el Gobierno de Mozambique al declarar el estado de emergencia durante el fenómeno de El Niño que provocó una grave sequía en 2015/16. Este suceso llevó a revisar el marco legal para la gestión del riesgo de desastres, en concreto: los instrumentos normativos para la gestión del riesgo de sequía severa; la identificación del nivel de alerta; la definición de las líneas de decisión para declarar el estado de emergencia; y el establecimiento de una capacidad de respuesta oportuna para mitigar los impactos negativos de la sequía.

Como resultado, los documentos de política nacional ahora integran la ocurrencia de eventos de sequía severa, y las sequías son priorizadas en el Plan Maestro para la Reducción del Riesgo de Desastres (PDRRD 2017-2030) y la Ley de Gestión y Reducción del Riesgo de Desastres (Ley n.10/2020).

Un sistema de alerta temprana para la sequía

A raíz de estas acciones, el Instituto Nacional de Gestión de Desastres (INGD) puso en marcha una iniciativa multisectorial para establecer un sistema de alerta temprana para la sequía. Este sistema integra el enfoque de financiación basado en la previsión, que implica el diseño y la implementación de acciones anticipatorias para mitigar el impacto de los desastres antes de que ocurran y así reducir la necesidad de ayuda humanitaria.

Varios organismos gubernamentales apoyan esta iniciativa, entre ellos el Instituto Nacional de Meteorología y el Ministerio de Agricultura, que prestan apoyo técnico al INGD para la generación de datos de previsión mediante imágenes de satélite y la ampliación de la capacidad de vigilancia de la sequía.

El grupo de trabajo técnico para la alerta temprana de la sequía

Para reforzar la colaboración entre los diferentes actores, el INGD, a través de su División para el Desarrollo de las Zonas Áridas y Semiáridas, coordina un grupo de trabajo técnico nacional multisectorial para la alerta temprana de la sequía. Este grupo apoya al gobierno en el establecimiento de mecanismos de alerta adecuados y umbrales de alerta para declarar el estado de emergencia en caso de eventos de sequía, así como en la planificación de acciones para mitigar los impactos humanitarios negativos de la sequía en Mozambique.

El grupo de trabajo técnico consta de tres subgrupos. Uno se centra en la previsión y la alerta temprana y se encarga de definir y supervisar los umbrales de riesgo de sequía. El segundo tiene la responsabilidad de orientar sobre la selección de intervenciones de acción anticipatoria de impacto, que se formalizarán en protocolos de acción anticipatoria. El tercer subgrupo se dedica a coordinar los mecanismos de financiación, lo que implica explorar las vías más viables para secuenciar las distintas herramientas de financiación del riesgo de catástrofes, incluido el seguro soberano African Risk Capacity contra fenómenos naturales extremos.

Integración de la protección social en la Acción Anticipatoria

Un aspecto interesante del giro de Mozambique hacia las acciones anticipatorias de la sequía es la integración de los agentes de protección social como colaboradores en el diseño y la ejecución de las acciones tempranas. Entre ellos se encuentran el Instituto Nacional de Acción Social y el Ministerio de Género, Infancia y Acción Social.

Los vínculos entre la protección social y la Acción Anticipatoria son diversos. Van desde la información de las transferencias de efectivo de protección social con factores desencadenantes de sequía predefinidos, hasta la selección enérgica de los grupos de población de mayor riesgo antes de que se produzca el impacto de una catástrofe.

La eficacia de estos enfoques se está probando actualmente en cuatro distritos: Chibuto y Guijá, en la provincia de Gaza, y Marara y Changara, en la provincia de Tete. En 2021, los agentes y socios del gobierno local desarrollaron protocolos de acción anticipatoria para la sequía en estos cuatro distritos, que se activarían si se alcanzara un nivel de activación. El programa de transferencias de emergencia del Instituto Nacional de Acción Social -el programa de apoyo social directo posterior a la emergencia- se incluyó como parte de estos protocolos, y representa el 68% del presupuesto que se prevé liberar si se alcanza un nivel desencadenante de sequía.

Los cuatro distritos ya han aprobado sus protocolos de Acción Anticipatoria y los han incluido en los planes de contingencia provinciales y nacionales correspondientes. Tras la aprobación del Plan Nacional de Contingencia del gobierno, con elementos integrados de acción anticipatoria, prosiguen ahora las actividades de seguimiento y previsión de cara a una posible activación de los protocolos de acción anticipatoria en el próximo periodo. Se espera que la metodología de preparación de protocolos de acción anticipatoria en los distritos piloto se extienda a más regiones del país.

Lecciones aprendidas

La colaboración en torno al sistema de alerta temprana de la sequía en Mozambique pone de relieve el importante potencial de la integración de las transferencias de protección social -en este caso, a través del programa de apoyo social directo posterior a la emergencia- como forma de mitigar los impactos de la sequía. Este ha sido un resultado importante del trabajo conjunto entre el Instituto Nacional de Acción Social y el INGD para mejorar las acciones de mitigación de los impactos negativos de la sequía.

Aunque se han logrado avances significativos en el campo de la anticipación de la sequía en Mozambique, aún quedan retos para el futuro.

  • Será necesario que el proceso siga evolucionando, incluyendo: la plataforma del grupo de trabajo técnico para la alerta temprana de la sequía; el desarrollo de protocolos de acción anticipatoria para una posible activación, y para la implementación de intervenciones anticipatorias antes de la sequía; y garantizar la coherencia y los estándares de calidad en la preparación de planes para los diferentes distritos propensos a la sequía.
  • Para integrar mejor los instrumentos de protección social en los planes de acción anticipatoria, es necesario mejorar y adaptar las herramientas de financiación existentes para que puedan utilizarse para fusionarse o alinearse con los pagos oportunos de protección social.
  • Para ampliar y extender la Acción Anticipatoria, será necesario identificar fondos y capacidades adicionales.

Los socios del grupo de trabajo técnico nacional sobre alerta temprana de sequía, bajo la dirección y el liderazgo del Instituto Nacional de Gestión y Reducción del Riesgo de Desastres, están preparados para afrontar y superar estos retos avanzando juntos.

Este blog ha sido escrito por Paulo Sergio Tomás, director nacional de la División de Desarrollo de Zonas Áridas y Semiáridas del INGD, Epifânia Huate, oficial técnico de la División de Desarrollo de Zonas Áridas y Semiáridas del INGD, Anna Carolina Machado, oficial de políticas de programa - protección social, PMA Mozambique, y Silvia Pieretto, oficial de políticas de programa - adaptación al cambio climático y resiliencia, PMA Mozambique.oficial de políticas de programa - protección social, PMA Mozambique , y Silvia Pieretto, oficial de políticas de programa - adaptación al cambio climático y resiliencia, PMA Mozambique.

El World Food Programme (WFP) apoya el actual programa de Acción Anticipatoria en Mozambique, tanto técnica como financieramente, junto con la Unión Europea, las Operaciones Europeas de Protección Civil y Ayuda Humanitaria (ECHO), la Dirección General de Cooperación Internacional y Desarrollo (DEVCO), el gobierno de Noruega y el Acelerador de Innovaciones del PMA.